lunes, 8 de junio de 2015

LA MONTAÑA DORADA.-


   Érase una vez dos chicos que querían ir a la “montaña Dorada”. Muchos lo habían intentado pero nadie lo había conseguido. Bien de mañana los dos héroes salieron del pueblo por la calle Tercera de San Pablo, pasando primero por las casas de sus familiares, para despedirse por si no volvían.

      Después de dejan preocupados a sus familiares, comenzaron la ruta por el Bosque Tenebroso. Después de un largo camino comenzaron a imaginar que los árboles querían comérselos, Así que empezaron a correr hasta dejar el bosque.

      Al dejar el bosque quedaron asombrados al contemplar la Montaña Dorada. Después de una hora de escalada, vieron un Centauro, mitad persona, mitad toro que estaba protegiendo el árbol dorado. Se quedaron esperando hasta que se despistó, momento en el que le clavaron los dos sus espadas en la espalda, su único punto débil.


     De esta forma consiguieron la inmortalidad tras comerse las manzanas Doradas que colgaban del Árbol Dorado.
     Al llegar a su aldea, los familiares les estaban esperando debido al mucho tiempo que tardaron. La madre de uno de ellos los vio a lo lejos saliendo del Bosque Tenebroso y dio el aviso. Todos salieron a recibirlos y a escuchar cómo consiguieron la Inmortalidad.

     Los dos valientes contaron muy despacio y con muchos detalles su hazaña, y todos sus familiares quedaron embobados por sus palabras. Al final, explicaron que el Don conseguido lo utilizarían para ayudar a todos los necesitados.

     
                                           Youssef. VILLALBA BAJA